El 8 de Marzo, día histórico en el que conmemoramos la lucha de las mujeres por alcanzar sus derechos fundamentales, ha tenido un recorrido breve pero intenso desde que a principios del siglo XX, aquellas mujeres organizadas decidieron buscar un día que sirviera de símbolo en la lucha de las mujeres de la clase obrera.
Un día que recordará a todas las que, desde las distintas revoluciones que recorrieron el llamado Occidente a partir del siglo XVIII, fueron vanguardia incansable en la lucha contra el poder, de por sí patriarcal. Desde la marcha a Versalles en 1789, pasando por las desvirtuadas petroleras de la Comuna de París, las faeneras de Málaga, o las de Barcelona durante la Gran Guerra. Sin olvidar que fue un 8 de marzo cuando las mujeres iraníes decidieron en 1979 revelarse contra la opresión de una revolución quebrantada.
En los últimos tres años, mujeres de todo el mundo se han levantado contra los feminicidios, las violaciones y las desapariciones forzosas de mujeres que lideraban protestas legítimas contra el sistema, nos hemos unido contra el endurecimiento de las condiciones de vida de muchas mujeres en todas partes del mundo y contra el sistema capitalista que mantiene sus grilletes bien apretados en nuestros pies.
Dejar de lado el carácter de lucha, subversión y plante que ha tenido históricamente este día, no solo para las mujeres, para toda la clase obrera, es un error. Y es un error acabar con tres años de llamamiento a una huelga general liderada por las mujeres, para parar el mundo. Porque no se han cumplido nuestras exigencias, ni las demandas históricas, ni las mas concretas de los últimos años, ni siquiera, las que están legisladas y por tanto legitimadas pero invisibilizadas. Eso supone un paso atrás en la lucha contra la situación de doble explotación que padecemos y contra los tiranos que, sirviéndose de la injusticia de este sistema, maltratan la Tierra y sus pueblos en su parte más débil: la clase obrera.
El 8 de Marzo es un día de lucha.
Y este año, aquí, no puede ser de otro modo. Es necesario que recordemos por qué:
- La indefensión y desigualdad de todas las mujeres. Leyes de igualdad y de violencia sin desarrollo. Sin su debido cumplimiento, ni presupuesto.
- La reforma del artículo 135. El pago de la deuda.
- La reforma del código penal, y sus leyes patriarcales.
- Las manadas, los asesinos y los violadores.
- Lal ley de memoria histórica. Billy el niño. La desbandá, mayoritariamente mujeres con hijas e hijos.
- La ley mordaza. Los raperos, el coño insumiso, Molero.
- La ley educativa no cumpliéndose las demandas de igualdad aprobadas. Los acuerdos con el Vaticano. La impunidad de los curas violadores y el latrocinio de los bienes populares inmatriculados por la iglesia.
- Las reformas laborales de los distintos gobiernos, tanto del PP como del PSOE junto con sus distintos socios según la conveniencia. La desidia de los grandes sindicatos. La pobreza de lxs asalariadxs con trabajos más precarizados, medias jornadas, y ausencia de conciliación real y efectiva, que sigue haciendo recaer sobre nosotras el trabajo no remunerado (cuidados y crianza).
- La brecha salarial. La miseria de las pensiones no contributivas.
- La millonaria banca rescatada y los desahucios. La pobreza de las mujeres y la infancia.
- Las privatizaciones en educación, sanidad y pensiones. El negocio de lo público. La pensión de Felipe González. Los cargos públicos en las grandes corporaciones.
- La doble jornada laboral que obliga a las mujeres a ocuparse de los cuidados en la invisibilidad del hogar.
- La ley de dependencia. La esclavitud de las mujeres migradas.
Por todo ello, son muchos los motivos para que las trabajadoras y trabajadores sigamos luchando en la calle cada vez con más intensidad por acabar con estas situaciones y políticas que no provocan si no aumentar la desigualdad y por tanto haciendo imprescindible ir a la huelga el 8M.
Las organizaciones abajo firmantes hacemos un llamamiento a construir la huelga general feminista el 8 de marzo y a participar en un Bloque Crítico en la manifestación para poder visibilizar la necesidad de la huelga hasta que la igualdad plena sea alcanzada y nuestras reivindicaciones satisfechas.
Os invitamos a formar parte de este BLOQUE CRÍTICO, para lo que os emplazamos en la esquina de confluencia de Alameda Principal con Alameda de Colón, desde donde nos incorporaremos al recorrido oficial que partirá desde la citada Alameda de Colón, esquina Muelle de Heredia
LA LUCHA SIGUE GOBIERNE QUIEN GOBIERNE
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